1. Chips: Muchos fabricantes en el mercado utilizan el mismo chip de compresión, pero la calidad de la compresión de la imagen puede variar. Esto se debe a las diferencias en los algoritmos, la optimización de datos después de la compresión de la imagen y cómo el algoritmo procesa los datos originales. En el ámbito de la compresión suave en China, el chip más ampliamente utilizado es la serie 71XX de Philips. La serie 71XX ofrece imágenes claras y fue ampliamente utilizada anteriormente para tarjetas de captura de TV. Su filtro de peine 3D, que proporciona una sensación de profundidad y capas espaciales en las imágenes, supera a otros chips. Como resultado, combinar la cabeza de alta frecuencia de Philips con un chip 71XX para tarjetas de TV fue muy popular.

2. Algoritmos: Cuando los chips son iguales, los algoritmos determinan la calidad de la imagen. El algoritmo dicta cómo la cámara captura y comprime la imagen original. Preguntas como si realizar compresión parcial o múltiple pueden afectar la calidad de la imagen. La compresión excesiva reduce la calidad de la imagen, pero dadas las limitaciones de los dispositivos de almacenamiento, especialmente cuando los discos duros de gran capacidad eran caros, era necesaria cierta cantidad de compresión. Para encontrar un equilibrio, los buenos fabricantes utilizan el algoritmo H.264. H.264 combina las fortalezas de estándares anteriores, logrando avances significativos en muchas áreas. Puede ahorrar hasta un 50% en bitrate en comparación con estándares anteriores como H.362+ y MPPGE-4 SP, reduciendo significativamente los requisitos de almacenamiento.

3. Resolución del Monitor: La resolución de la pantalla se refiere a cuán claramente se pueden ver los objetos. Una mayor resolución proporciona una mayor claridad en los detalles, incluso al hacer zoom significativo, sin distorsión. Una resolución más baja resulta en una borrosidad percibida incluso sin hacer zoom. Aquellos que han configurado sistemas saben que las imágenes a menudo no son claras en condiciones operativas, y esto se debe en parte a las bajas resoluciones. Los sistemas de vigilancia suelen utilizar monitores que admiten una resolución de 1024x768. Incluso si compra un monitor de 21 pulgadas que ofrece una resolución de 1280x1024, la mayoría de los fabricantes solo admiten 1024x768, lo que puede distorsionar la imagen. Por lo tanto, un monitor más grande no significa necesariamente mejores resultados.

4. Resolución de Grabación: Al igual que la resolución de la pantalla, la resolución de grabación está determinada por algoritmos. La resolución de grabación es directamente proporcional a la calidad de la imagen, siendo las resoluciones de grabación más altas las que producen imágenes más claras. Sin embargo, una resolución de grabación más alta también requiere más espacio de almacenamiento. La calidad de la compresión de la imagen difiere con varios algoritmos, incluso cuando se utiliza el mismo archivo.

5. Tasa de Bits: La tasa de bits, en pocas palabras, es la cantidad de datos en la imagen. Cuanto mayor sea la tasa de bits (más datos almacenados por segundo), más clara será la imagen. Reducir la tasa de bits significa sacrificar algunos detalles de la imagen para ahorrar espacio de almacenamiento. Existe una relación directa entre la tasa de bits y la calidad de la imagen. Muchos usuarios optan por limitar la tasa de bits para ahorrar espacio de almacenamiento, pero podrían no darse cuenta de que reducir la tasa de bits resulta en una menor calidad de imagen.
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