1. Practicidad: El sistema debe diseñarse teniendo en cuenta el entorno local, los objetivos de vigilancia, los métodos de supervisión, el mantenimiento y la escala de inversión. Debe satisfacer los requisitos operativos de la videovigilancia urbana y la gestión de la seguridad pública.

2. Confiabilidad y Estabilidad: Utilice tecnología madura y equipos confiables. Los componentes críticos deben contar con respaldos o medidas de redundancia. El software del sistema debe contar con soporte de mantenimiento y una sólida tolerancia a fallas, garantizando un tiempo operativo prolongado y una rápida recuperación en caso de fallos del sistema.

3. Escalabilidad: Opte por una arquitectura distribuida y un diseño modular para adaptarse a la expansión del sistema, mejoras de funciones y actualizaciones de software. Los usuarios deben tener la flexibilidad de ajustar el sistema según sus necesidades en evolución.

4. Facilidad de Actualizaciones y Mantenimiento del Sistema: Dada la escala del sistema, el software y los dispositivos centrales deben ofrecer capacidades de actualización y mantenimiento automáticos. Además, cada subsistema debe mantener registros de trabajo exhaustivos, que abarquen módulos del sistema y dispositivos centrales, asegurando un mantenimiento eficiente del sistema.

5. Gestión del Sistema y Operación Sencilla: Debido a la complejidad y escala de la red, la plataforma de software de gestión debe contar con una arquitectura de sistema bien estructurada. La clara separación entre la gestión central del sistema y la gestión comercial es imperativa para satisfacer diversas necesidades de aplicación. Con varios servidores de gestión, soluciones de almacenamiento y servidores de reenvío, las capacidades de gestión de red del sistema deben ser sólidas para facilitar el mantenimiento diario. Las interfaces de gestión y usuario proporcionadas deben ser claras, concisas y fáciles de usar, con operaciones sencillas, flexibles e intuitivas para agilizar la gestión y el mantenimiento.

6. Soporte para Desarrollo Secundario: El sistema de red de alarma y videovigilancia de una ciudad generalmente consta de cientos o incluso miles de cámaras. Para garantizar que la plataforma aproveche eficazmente sus recursos de video, el sistema debe admitir el desarrollo secundario. Esto garantiza el crecimiento y la evolución continuos de la plataforma, fomentando el objetivo final de "valor a partir del video".

7. Compatibilidad y Compatibilidad con Versiones Anteriores: Construir un sistema de red de monitoreo y alarma para una ciudad no implica desechar los sistemas analógicos existentes. El enfoque ideal es incorporar sistemas analógicos siempre que sea posible, integrándolos perfectamente en el sistema completamente digital. Establecer una conexión sin problemas entre estos dos sistemas crea una red de imágenes de video urbano completa para el monitoreo.

8. Relación Rendimiento-Precio: Los diseñadores deben establecer la funcionalidad del sistema de manera apropiada, tomar decisiones de configuración correctas y elegir componentes de alta calidad, manteniendo el costo total del sistema bajo. Se debe dar prioridad a la selección de cámaras en el frente y a las capacidades de software en la parte posterior. Por ejemplo, las cámaras de alta calidad con menos de 460 líneas de TV son contraproducentes, incluso si el resto del sistema es de alta calidad. Se pueden requerir funciones especiales como rango dinámico amplio en ciertas aplicaciones.

9. Medidas de Seguridad: La seguridad del sistema abarca varios aspectos. Prevenir que usuarios y dispositivos no autorizados accedan al sistema es de suma importancia. Se deben emplear diferentes niveles de verificación para varios usuarios, incluidos administradores y usuarios regulares. Se debe evitar que los dispositivos ilegítimos accedan al sistema. Los sistemas de monitoreo en red son susceptibles a ataques de piratas informáticos, por lo que son necesarias medidas de seguridad efectivas para evitar el acceso no autorizado, ataques e infecciones por virus. Consideraciones adicionales de seguridad incluyen protección contra rayos, sobrecargas, cortes de energía, interferencias electromagnéticas y daños deliberados, proporcionando salvaguardias de seguridad integrales.

10. Compatibilidad y Estandarización: La compatibilidad es clave para interconectar varios dispositivos de diferentes fabricantes y con diferentes protocolos. El sistema debe facilitar la comunicación efectiva y el intercambio de datos, con el objetivo de maximizar la compatibilidad e interoperabilidad entre dispositivos y sistemas. Un mayor grado de estandarización y apertura prolonga el ciclo de vida del sistema. Los protocolos de control, los protocolos de transmisión, los protocolos de interfaz, la codificación
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